En 1891 el Ferrocarril Plasencia-Astorga, también denominado Ferrocarril del Oeste, se integró el la Compañía del Madrid a Cáceres y Portugal (MCP). Así, su serie de locomotoras 201 a 219 (aunque faltaban ya las 201 y 202) quedaron integradas en la nueva compañía con la misma numeración y se encargaban de los servicios de Plasencia a Astorga, Ávila a Salamanca, Salamanca a Fuentes de Oñoro y Medina a Salamanca.
Pero ya a mediados de ese decenio se hizo patente la necesidad de ampliar el parque de locomotoras, al irse abriendo más tramos de la línea de Plasencia a Astorga. Dadas sus características y los tipos de servicios a realizar, volvió a estimarse como más oportuno la utilización de máquinas de rodaje 0-3-0. De este modo, se solicitó a la factoría Cockerill diez locomotoras de ese tipo, que fueron servidas en 1898, y constituyeron la serie 301 a 310 de la MCP.
Una característica muy singular de estas locomotoras era su gran superficie de parrilla con el fin de contrarrestar en la medida de lo posible la mala calidad del carbón con que, en general, iban a ser alimentadas. Tenían nada menos que 3,45 m2 cuando una superficie típica en locomotoras de este tipo podía oscilar entre 1,5 a 2 m2.
Con ese requerimiento el hogar no podía ir en voladizo sino montado sobre el último eje. Dado que en aquel momento todavía se consideraba casi obligatorio no subir mucho el eje de la caldera (que era la solución para que el hogar quedara por encima del bastidor), se ganó espacio instalando un corto bastidor auxiliar en esa zona, que rodeaba por fuera las ruedas de ese eje posterior. En ese bastidor se colocaron las cajas de grasa y se ganó espacio para el hogar. Resultaron así unas locomotoras con una imagen muy característica que desarrollaban una significativa potencia de 1104 CV, con un timbre de 10,5 kg/cm2 y que ofrecían un esfuerzo de tracción de 6569 kg, ya de los más elevados de este tipo de locomotoras.
Una característica muy singular de estas locomotoras era su gran superficie de parrilla con el fin de contrarrestar en la medida de lo posible la mala calidad del carbón con que, en general, iban a ser alimentadas. Tenían nada menos que 3,45 m2 cuando una superficie típica en locomotoras de este tipo podía oscilar entre 1,5 a 2 m2.
Con ese requerimiento el hogar no podía ir en voladizo sino montado sobre el último eje. Dado que en aquel momento todavía se consideraba casi obligatorio no subir mucho el eje de la caldera (que era la solución para que el hogar quedara por encima del bastidor), se ganó espacio instalando un corto bastidor auxiliar en esa zona, que rodeaba por fuera las ruedas de ese eje posterior. En ese bastidor se colocaron las cajas de grasa y se ganó espacio para el hogar. Resultaron así unas locomotoras con una imagen muy característica que desarrollaban una significativa potencia de 1104 CV, con un timbre de 10,5 kg/cm2 y que ofrecían un esfuerzo de tracción de 6569 kg, ya de los más elevados de este tipo de locomotoras.
Foto de fábrica de las locomotoras de la serie 301-310 del MCP. Puede verse el travesaño del bastidor auxiliar en la zona del tercer eje motor. |
Cuando la MCP se integró en la Compañía del Oeste, estas locomotoras ampliaron su radio de acción a otras líneas, además de la que ya servían, tales como la de Medina a Zamora, Medina a Salamanca, Ávila a Salamanca y Salamanca a Fuentes de Oñoro. Se encargaban tanto de trenes de mercancías como de viajeros llegando incluso a remolcar al Surexpreso.
Una locomotora de esta serie, tal como aparece en el álbum de RENFE de 1947 |
De estas diez locomotoras sólo dos no llegaron a RENFE: las 302 a 305. Las ocho restantes formaron la serie 030-2519 a 030-2526. Estuvieron siempre basadas en Salamanca si bien, en 1949, la primera, 2519, estaba en Arroyo de Malpartida y la 2520 en Vigo. En cualquier caso, ya en 1954, figuraban todas en Salamanca donde se obtuvieron básicamente las pocas imágenes que se tienen de ellas.
En 1955, se desguazó la 2519, primera de la serie. En 1958 les llegó el turno a las 2520 y 2525. Ya en 1965 se desguazó la 2522. En 1966 las 2523 y 2524 y por fin en 1968 las 2521 y 2526.
En 1954, Wyrsch fotografió a la primera de la serie, la 030-2519, en Salamanca (foto:Archivo Histórico Ferroviario del Museo del Ferrocarril de Madrid – Fundación de los Ferrocarriles Españoles) |
En 1968 fue Jeremy Wiseman quien encontró a la 030-2521 todavía trabajando en Salamanca. Ese mismo año sería retirada y probablemente desguazada |
En 1955, se desguazó la 2519, primera de la serie. En 1958 les llegó el turno a las 2520 y 2525. Ya en 1965 se desguazó la 2522. En 1966 las 2523 y 2524 y por fin en 1968 las 2521 y 2526.
Bernard Harrison todavía llegó a tiempo en 1968 de ofrecernos una imagen en color de la 2521 esperando ya probablemente el desguace. |
Nada nos queda de ellas, salvo el recuerdo y algunas fotos. Con ello, al menos las podemos imaginar resoplando armónicamente subiendo el puerto de Béjar. Y recordar también a los esforzados fogoneros que tendrían que ir alimentando continuamente su inmenso hogar.
FUENTES CONSULTADAS:
Marshall, L (1987): Los tiempos del vapor en RENFE. Aldaba ediciones.
Reder, G. y Fernández Sanz, F. (2011): Locomotoras de la Compañía Oeste. Historia de la tracción vapor en España. Tomo IV.
FUENTES CONSULTADAS:
Marshall, L (1987): Los tiempos del vapor en RENFE. Aldaba ediciones.
Reder, G. y Fernández Sanz, F. (2011): Locomotoras de la Compañía Oeste. Historia de la tracción vapor en España. Tomo IV.
Muy clásicas de la zona en su época en que prestaban servicio estas compactas 0-3-0,la verdad es que ese aspecto en mi opinion un tanto "tosco"las hacia inconfundibles,pero,debian de ser precisamente por ello fuertes y duras como una roca.Creo que su aspecto quizá también podía "engañar"a priori,pues no aparentaban esa muy notable potencia y esfuerzo de tracción para el tipo de locomotora de que se trataba,lo cual jugaba como un aliciente mas a su favor.Muy curiosa la ingeniosa solución del tamaño de su parrilla,como contrarrestro al deficiente carbón que consumían.Si,realmente hubo locomotoras,como era esta misma serie y otras,que no las hubieras imaginado al frente de todo un Surexpreso,dicho sea sin hacer menoscabo de las maquinas,seria la rama "corta"Lisboa-Medina del Campo en la época...Son muy buenas todas las imágenes,capturando ese rudo y humilde aspecto de las maquinas,pero,lleno de encanto.Suscribo las líneas finales
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