1912
Subiendo a la sierra de Córdoba con locomotoras articuladas
Una de las principales preocupaciones de las compañías ferroviarias que tenían en sus líneas algunas zonas con rampas muy marcadas, curvas de pequeño radio e infraestructuras que no podían aguantar gran peso por eje, era encontrar locomotoras con gran capacidad de vaporización -caldera grande- y que pudieran inscribirse sin problemas en ese tipo de curvas. En muchos casos, la única solución era recurrir a locomotoras articuladas sin un único bastidor rígido y dotadas, en general de sistemas de doble expansión o compound. Su diseño se llevó a cabo mediante distintos planteamientos básicos: Uno fue el denominado "Mallet" -por el que, como ya hemos visto en entradas anteriores, optó la Compañía del Central de Aragón- y otro el conocido por "Kitson-Meyer". Si el primero contemplaba un carretón delantero móvil y un trasero rígido con los cilindros de alta en éste y los de baja en el móvil, en el "Meyer" los dos carretones eran móviles y los cilindros, tanto de alta como de baja, se emplazaban en la zona central de la locomotora, muy cerca uno de otro, donde se ubicaban también dos ejes libres. Esta disposición acortaba mucho el recorrido del vapor desde uno a otro y disminuía así el problema de las fugas a través de conducciones flexibles. Un tipo de locomotoras basado en este último planteamiento fue el denominado "Du Bousquet" y resultó el elegido por la Compañía de Andaluces para atender a la tracción de los trenes carboneros en la línea denominada "de la sierra" entre Córdoba y Belmez, caracterizada por una fuerte rampa entre Córdoba y Cerro Muriano. A ellas va dedicada esta entrada.
Las diez locomotoras de este tipo y de configuración 031-130T que Andaluces solicitó a la factoría francesa Couillet estaban basadas en las utilizadas por la compañía del Nord para el remolque de trenes carboneros desde las minas de hulla de la zona fronteriza con Bélgica hasta París. En cualquier caso, para su servicio en España, y en concreto en la rampa de Córdoba a Cerro Muriano, se introdujeron tres modificaciones. La primera fue disminuir el radio de las ruedas motoras desde 1,455 m hasta 1,350 con objeto de asegurar un mayor esfuerzo de tracción. La segunda, suprimir o acortar los depósitos laterales de agua para disminuir el peso por eje -lo que obligaba muy frecuentemente a que las locomotoras llevaran tras ellas un vagón cisterna- y por último aumentar la superficie de parrilla en medio metro cuadrado para compensar de algún modo la peor calidad de los carbones.
Las locomotoras fueron recibidas por Andaluces en 1912 y numeradas como 601 a 610. Su potencia era de 1130 CV, el timbre subía ya a 16 kg/cm2 y el esfuerzo de tracción, realmente notable: 17394 kg, el mayor entre las locomotoras de aquella época. Al parecer se recibieron en el puerto de Málaga, se montaron en los talleres de la compañía y efectuaban pruebas en unas vías especiales en Campanillas.
Fueron asignadas al depósito de Córdoba-Cercadilla donde fueron coloquialmente conocidas como "las busquet" y durante muchos años cumplieron su función eficientemente.
Las actividades desarrolladas durante la Guerra Civil las sometió a un gran desgaste de modo que RENFE debió desguazar cuatro de ellas y operar sólo con las 604 a 609, que fueron numeradas como 062-0401 a 062-0406. Debido probablemente tanto a su estado como a su relativa complejidad mecánica hizo que fueran retiradas muy pronto y a ello se debe la casi total ausencia de testimonios gráficos de ellas.
En 1943 fue retirada la 605 (0402), en 1944 la 607 (0404), en 1946 la 608 (0405) y en 1947 las tres restantes 604 (0401), 606 (0403) y 609 (0406). RENFE las sustituyó en un principio por las 160-4001 a 4004, las famosas 41 a 44 "Borsig" del Central de Aragón pero estuvieron muy poco tiempo operativas y fueron retiradas en 1952. Por otra parte, y según apunta Fernando Fernández Sanz también fueron destinadas a ese recorrido a finales de los años cuarenta las Kitson-Meyer del Lorca a Baza y Águilas aunque también se retiraron en 1953. Todas ellas fueron sustituidas básicamente por locomotoras "mastodonte" de la serie 240-2001 a 2050, con frecuencia en doble tracción cabeza-cola. Años después, quizás en los finales de los sesenta, éstas fueron sustituidas por las inefables ALCo 1300.
Lástima no haberlas podido ver a las "busquet" resoplando en la subida hacia Cerro Muriano y que, además, hayan quedado tan pocas imágenes de ellas. Fueron otra muestra más del gran ingenio de aquellos ingenieros ferroviarios del siglo XX que no puede olvidarse.
Al menos algunos de los vagones cisterna de las Du Bousquet las sobrevivieron. Aquí aparece uno de ellos fotografiado en Córdoba en los años setenta (Amoluc/cortesía J. A. Méndez Marcos) |
Lástima no haberlas podido ver a las "busquet" resoplando en la subida hacia Cerro Muriano y que, además, hayan quedado tan pocas imágenes de ellas. Fueron otra muestra más del gran ingenio de aquellos ingenieros ferroviarios del siglo XX que no puede olvidarse.
FUENTES CONSULTADAS:
González Márquez, M. (1988): Evolución de la tracción en el ferrocarril Córdoba-Belmez-Almorchón. Boletín "Tracción" de la Asociación de Amigos del Ferrocarril de Madrid (AAFM)
Reder, G. y Fernández Sanz, F. (2010): Locomotoras de Andaluces. Historia de la Tracción Vapor en España. Tomo III. Ed. Revistas Profesionales.
Reder, G. y Fernández Sanz, F. (2010): Locomotoras de Andaluces. Historia de la Tracción Vapor en España. Tomo III. Ed. Revistas Profesionales.
Rennes, M. (2019): Huellas malagueñas de un ferroviario Emile Rennes (1868-1946). umaeditorial (Universidad de Málaga)
Fototeca ferroviaria de Juan Antonio Méndez Marcos
Fototeca ferroviaria de Juan Antonio Méndez Marcos
Desde luego debía resultar algo realmente digno de ver el observar a estas poderosas máquinas rendir a pleno esfuerzo!,máxime dada su gran singularidad...
ResponderEliminarA pesar de su indudable aspecto apabullante y hasta algo "intimidante"ya se adivinaba esa complejidad y pequeños inconvenientes como el hecho de necesitar casi de manera ineludible el vagón-cisterna para su abastecimiento de agua,por cierto,de una gran encanto estético en mi opinión.Al menos,aunque su vida útil no fuera tan extensa,sí que rindieron y prestaron servicio intensamente en sus cometidos,que no es poco!...Las inscripciones tan identificables de "Andaluces"también contribuían en esa tan destacable imagen...Al observarlas en las imágenes,me sigue impresionando esa "agresiva"impronta estética de las máquinas,a lo que también contribuyen en cierta medida las tonalidades de las imágenes,pero,a buen seguro se las
ResponderEliminarimagina así...Las locomotoras que posteriormente tomarían su relevo también se esforzarían lo suyo en la tracción de las composiciones!,efectivamente,otra excelente muestra del ingenio ferroviario de época fueron aquellas "Busquet",que por supuesto no se puede pasar por alto!...