Al igual que, como ya vimos en una entrada anterior, el ferrocarril de Sevilla a Cadiz adquirió un lote de locomotoras tipo Creusot, también lo hizo muy poco tiempo después la Compañía de Córdoba a Málaga. Se trataba de un lote de 15 locomotoras similares a las Creusot de MZA. Diez de ellas fueron suministradas entre 1864 y 1865 por Haine-St. Pierre, Couillet y Saint Leonard, mientras que las cinco últimas llegaron directamente desde Creusot cedidas desde fábrica por MZA. Eran máquinas de casi 500 CV, con un esfuerzo de tracción de 5553 kg y un timbre de caldera de 8,5 kg/cm2. Recibieron la numeración 53 a 67 y fue el tercer grupo de locomotoras del Córdoba a Málaga tras cuatro Creusot viajeros y dos mamut de uso mixto.
Cuando se creó la Compañía de Andaluces, estas locomotoras fueron renumeradas como 153 a 167 y desarrollaron sus servicios por distintas líneas y enclaves de la compañía.
Tres de las locomotoras de esta serie fueron modificadas dentro de un plan general de transformación de locomotoras que se llevó a cabo entre 1903 y 1926 con objeto de paliar de algún modo su bajo rendimiento debido a la deficiente calidad de los carbones utilizados. En el caso que nos ocupa se actuó sobre las máquinas 158, 160 y 161 y se trató fundamentalmente de ampliar el hogar. Esta ampliación forzó a aumentar la elevación de la caldera sobre el bastidor dándolas un aspecto bastante desgarbado pero muy característico. En las 158 y 160 se acortaron los tubos de la caldera de modo que el hogar caía sobre el último eje pero en la 161 esta modificación no se hizo y quedó un hogar excesivamente en voladizo.
La 64 del Córdoba a Málaga, o 164 de Andaluces o 030-2401 de RENFE (Foto: Parque Motor RENFE) |
La 030-2405 maniobrando en Granada en 1956 (Foto: Wyrsch) |
Tres de las locomotoras de esta serie fueron modificadas dentro de un plan general de transformación de locomotoras que se llevó a cabo entre 1903 y 1926 con objeto de paliar de algún modo su bajo rendimiento debido a la deficiente calidad de los carbones utilizados. En el caso que nos ocupa se actuó sobre las máquinas 158, 160 y 161 y se trató fundamentalmente de ampliar el hogar. Esta ampliación forzó a aumentar la elevación de la caldera sobre el bastidor dándolas un aspecto bastante desgarbado pero muy característico. En las 158 y 160 se acortaron los tubos de la caldera de modo que el hogar caía sobre el último eje pero en la 161 esta modificación no se hizo y quedó un hogar excesivamente en voladizo.
Toda la serie logró sobrevivir a la Guerra Civil pero en 1942 ya se desguazaron tres. Constituida RENFE las locomotoras sin modificar integraron la serie 030-2400/2409. Las modificadas, al haber aumentado su esfuerzo de tracción, punto clave en RENFE para la estructuración de sus series, formaron otras dos de un sólo ejemplar. Así la 160 con 675 CV y 5977 kg de esfuerzo de tracción, se convirtió en la 030-2463,
mientras que la 161 con la misma potencia pero con un esfuerzo de 6530 kg debido a haber sufrido algunas otras modificaciones, se convirtió en la 030-2504.
Sin embargo, resulta muy curioso que, la también modificada 158, con las mismas características que la 160, quedara incluida en el grupo de las 2400-2409 con el número 030-2404.
La 160 de Andaluces, 030-2463 en RENFE (Foto: Álbum Parque Motor RENFE) |
mientras que la 161 con la misma potencia pero con un esfuerzo de 6530 kg debido a haber sufrido algunas otras modificaciones, se convirtió en la 030-2504.
La 161 de Andaluces, 030-2504 en RENFE, en Granada, en 1952 (Foto: Gustavo Reder) |
La 158 de Andaluces, 030-2404 en RENFE (Foto: John Morley) |
Desde su inclusión en RENFE hasta su desguace, las 2400-2409 estuvieron en depósitos andaluces, especialmente, en Córdoba, Málaga y Granada. Las primeras en desaparecer fueron las 2400 y 2402, que lo hicieron en 1943, mientras que la última fue la 2406 que lo hizo en 1960.
Por su parte, las 2463 y 2504 acabaron sus días haciendo maniobras en Málaga y Granada, siendo respectivamente dadas de baja en 1954 y 1955.
La relativamente temprana desaparición de estas locomotoras hace muy difícil encontrar imágenes suyas, salvo alguna suelta de Reder, Morley o Wyrsch. Sirvan ellas, junto con el magnífico trabajo enciclopédico de Fernando F. Sanz, como recuerdo que las haga pervivir un poco más en nuestra memoria.
BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA:
Fernández Sanz, F: Locomotoras de Andaluces. Historia de la tracción vapor en España. Tomo III. Revistas Profesionales S.L. 1910
La relativamente temprana desaparición de estas locomotoras hace muy difícil encontrar imágenes suyas, salvo alguna suelta de Reder, Morley o Wyrsch. Sirvan ellas, junto con el magnífico trabajo enciclopédico de Fernando F. Sanz, como recuerdo que las haga pervivir un poco más en nuestra memoria.
BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA:
Fernández Sanz, F: Locomotoras de Andaluces. Historia de la tracción vapor en España. Tomo III. Revistas Profesionales S.L. 1910