1927
"Consolidaciones" entre Burgos y Cidad
En una entrada anterior me referí a la creación del Ferrocarril Santander-Mediterráneo y a su corta aunque difícil evolución hasta su integración en RENFE. Comentaba también que dispuso de dos series de locomotoras para la tracción en su línea. Una fue la compuesta por cuatro locomotoras del tipo 030T numeradas como SM 12 a 15 -de las que traté en la citada entrada- y otra, más numerosa, compuesta por 22 unidades del tipo 140 construidas, como en el caso anterior, por la factoría Babcock&Wilcox. Fueron las SM 101 a 122 y a ellas va dedicada esta entrada.
En 1927, dos años después de la llegada de las cuatro 030T, se recibieron, procedentes también de Babcock&Wilcox, las primeras locomotoras tipo 140 "Consolidación" que el Santander-Mediterráneo iba a dedicar a sus principales servicios en línea. Tras las seis llegadas ese año, en 1928 llegaron cuatro más, y en 1929 lo hicieron otras doce. En un principio, las seis primeras fueron numeradas del 1 al 6, por delante de cuatro 030T que habían participado en la construcción de la línea y que eran las 7 a 10. Cuando llegaron las cuatro siguientes se matricularon a continuación como "nuevas" 7 a 10 mientras que las dos 030T que quedaban operativas en aquel momento pasaron a ser las 27 y 28. Sin embargo, la llegada del último lote de 12 máquinas hizo que todas las "Consolidación"se renumeraran como SM 101 a 122.
Foto de fábrica de las "Consolidación" que B&W construyó para el Santander-Mediterráneo |
Con estas locomotoras Babcock trató de conseguir unas máquinas aptas para mercancías y viajeros inspiradas en las "cuatrocientas Norte" aunque más reforzadas dado que la excelente infraestructura del SM permitía un mayor peso por eje. De este modo introdujo algunas modificaciones en la caldera, consiguió un ligero aumento en la superficie de calefacción y modificó algo el diámetro y carrera de los cilindros. Con un timbre que pasó a 14 kg/cm2, desarrollaban una potencia de 1373 CV -igual a las "cuatrocientas Norte", pero ofrecían un esfuerzo de tracción superior: 14135 kg respecto a los 12090 de las primeras, contando con un mismo diámetro de ruedas motoras: 1, 56 m. En cualquier caso, y según Fernández Sanz, no parece que llegaran a igualar el rendimiento de las "cuatrocientas" y los maquinistas opinaban que eran algo "torpes" debido a su poca aceleración. En cualquier caso su imagen era algo más estética.
Una de las SM-101 a SM-122 tal como aparece en el álbum de RENFE de 1947 |
La SM 103 ha llegado con un correo a la estación de Calatayud-Jiloca (autor desconocido/cortesía Juan Antonio Méndez Marcos |
Dado que los tráficos no evolucionaron como en principio se había previsto, un parque tan grande resultaba excesivo, de modo que en la primera mitad de los años treinta algunas de ellas fueron prestadas temporalmente al Central de Aragón e incluso se pensó, aunque no llegó a realizarse, vender algunas y adquirir automotores.
A RENFE llegaron todas y fueron las 140-2505 a 2526, ubicadas por tanto a continuación de las "cuatrocientas". Se mantuvieron en su línea original adscritas al depósito de Soria - de ahí el apodo de "las sorianas" por el que se las conocía- haciendo también trenes hasta Torralba. Hacia 1954 algunas de ellas fueron temporalmente asignadas al de Miranda.
Horarios del Santander-Mediterráneo -en la práctica Calatayud-Soria-Burgos-Cidad-Dosante- en agosto de 1954 |
La 140-2505 (ex SM-101) en la estación de Burgos en 1957 (Ch. Firminger) |
La 140-2510 con el correo de Burgos a Villarcayo y Cidad-Dosante en las cercanías de Sotopalacios en septiembre de 1962 (Marc Dahlström)
Dos años después Jeremy Wiseman encontraba a una de "las sorianas" justamente en el depósito de Soria |
La 2508 en Burgos en cabeza de un correo en 1966 (autor desconocido)
Finalmente volvieron a reunirse todas en Soria y se mantuvieron activas hasta 1967. En ese año se dieron de baja once de ellas y al año siguiente se retiraron las once restantes.
Una vez más ninguna de estas "sorianas" quedó para el recuerdo.
Probablemente en Valladolid. Años sesenta (autor desconocido)
Finalmente volvieron a reunirse todas en Soria y se mantuvieron activas hasta 1967. En ese año se dieron de baja once de ellas y al año siguiente se retiraron las once restantes.
Una vez más ninguna de estas "sorianas" quedó para el recuerdo.
En la estación de Soria con un típico ambiente ferroviario de la década de los 40-50 (AHF/MFM. Colección Vicente Garrido) |
FUENTES CONSULTADAS
Dobeson, K. M. (1988): El Ferrocarril Santander Mediterráneo. Aldaba ediciones.
Fernández Sanz, F. (2001): La construcción de locomotoras de vapor en España. Ediciones Trea.
Reder, G. y Fernández Sanz, F. (2013): Locomotoras de otras compañías de vía ancha. Historia de la tracción vapor en España, tomo V. Ed. Proyectos Editoriales S.L.
Fototeca Ferroviaria de Juan Antonio Méndez Marcos
Archivo Histórico Ferroviario del Museo del Ferrocarril de Madrid
Dobeson, K. M. (1988): El Ferrocarril Santander Mediterráneo. Aldaba ediciones.
Fernández Sanz, F. (2001): La construcción de locomotoras de vapor en España. Ediciones Trea.
Reder, G. y Fernández Sanz, F. (2013): Locomotoras de otras compañías de vía ancha. Historia de la tracción vapor en España, tomo V. Ed. Proyectos Editoriales S.L.
Fototeca Ferroviaria de Juan Antonio Méndez Marcos
Archivo Histórico Ferroviario del Museo del Ferrocarril de Madrid